La Educación Superior y en especial la educación Publica ha sido presa de la intención histórica de los gobiernos de turno, del desconocimiento de la responsabilidad de garantizarla como derecho, por lo que en el último periodo ha ejercido mecanismos de control académico y políticos, entre los cuales el asunto presupuestal ha pasado de la simple asfixia a condicionar la financiación de las instituciones publicas a sus indicadores académicos, de gestión y administrativos obligando de esta manera a ajustes y reestructuraciones académicas-administrativas bajo la concepción eficientista y gerencial que no es más que encajarla en la Universidad - Empresa desde el modelo neoliberal.
En el momento actual dicha intención se expresa en el proyecto de Ley del Plan Nacional Desarrollo 2006 – 2010 en artículos como el 38 donde es explicito que las universidades públicas deberán responder con su patrimonio y con sus ingresos ordinarios por el “pasivo pensional”. En tal caso, llegarán a un desequilibrio financiero conducente a su quiebra o a una reestructuración financiera-administrativa y al aumento de ingresos propios entiéndase AUTOFINANCIACION. Los beneficios laborales de profesores, empleados, trabajadores y contratistas están siendo limitados y recortados de hecho, so pretexto de hacer más eficiente la ejecución del gasto y en desmedro también de la calidad educativa y la función social que presta la universidad pública.
Puede interpretarse que dicha situación afecta exclusivamente a las universidades de orden Nacional por lo que como Universidad Distrital no nos toca, sin embargo la situación de nuestra universidad no es distinta pues con relación al pasivo pensional existente, este asciende a 450 mil millones de pesos, el cual se está cubriendo desde el presupuesto global de la Universidad siendo anualmente casi un 40 % de este, aunque la U.D desde hace un tiempo ha adelantado lo referente a pensiones (demanda de pensiones, creación del fondo de pensiones y cálculos actuariales) el gobierno nacional (Ministerio de Hacienda) no reconoce el total de su responsabilidad en la partida correspondiente al pago de pensiones y cada vez pone más objeciones para la firma del pacto de concurrencia desconociendo su obligación en esta.
Sin embargo en medio del déficit presupuestal por el que atraviesa la U.D para este año, la Secretaria de Hacienda Distrital (Alcaldía Mayor) aunque reconoce que tenemos un déficit de 10.600 millones para este año solo se compromete con 3.000 millones, planteando como fuente de ingreso para superarlo 4.600 millones de pesos provenientes del Min. Hacienda (bonos pensiónales y cesantías), dineros que son inciertos teniendo en cuenta la postura de hacienda; Dado el caso de que este dinero ingresé a la universidad, tendría una destinacion especifica, y no podría ser diferente a pensiones, los bonos pensiónales son “papeles” los cuáles la universidad en un plazo de un año debe negociar en el mercado hasta por un 50 % de su valor real, así las cosas esto es una falacia del Secretario de Hacienda Distrital. Así las cosas la situación para el próximo semestre es incierta pues una adición de 3000 millones es insuficiente siquiera para terminar en las condiciones precarias en las que hemos estado en los últimos años.
Otro elemento por el que atraviesa la U.D tiene que ver con la gobernabilidad y el futuro de la U, con relación al plan de desarrollo y la reforma orgánica, lo primero requiere exigir la definición con la participación directa de los estamentos de un rector en propiedad de una vez por todas y con respecto a la reforma orgánica y plan de desarrollo debe contemplarse y desarrollarse un proceso amplio, incluyente, decisorio que remita a un ejercicio democrático, solo así se gozara de legitimidad.
La propuesta hecha por el rector encargado para su discusión y definición de la reforma lejos de propiciar la deliberación e incidencia restringe la participación y la real decisión de los estamentos. Nuestra apuesta es por una CONSTITUYENTE UNIVERSITARIA cuyo sustantivo constituyente en nuestra concepción se refiere a sinónimo de cambio, de transformación, de reestructuración, con el sentido amplio de lo que significa este poder constituyente como capacidad colectiva de creación y de elaboración, en su sentido original y plenipotenciario.
Reformar la Universidad Distrital es una necesidad imperante que se relaciona no solo con cambiar un modelo administrativo y de dirección que hizo crisis, sino con repensarse la universidad en relación con un modelo de Nación, con la democracia al interior y el uso vigente de la Autonomía. Centrando primero en su función para derivar en sus estructuras administrativas y académicas. No se trata de cambios superficiales sino de transformaciones profundas. Se plantea la constituyente universitaria como generadora de cambio o actualización que parta de la expresión de la mayor democracia, de la participación de toda la comunidad. Un movimiento que tenga la fuerza y, capacidad suficientes para echar las bases de la universidad que necesitamos.
Es urgente resistir hasta el final en la EXIGENCIA por que el gobierno Distrital haga la Adición presupuestal necesaria (mas de 3000 millones) para funcionar dignamente y por que la administración de la universidad (rector –consejo Superior Universitario) asuman la CONSTITUYENTE UNIVERSITARIA como escenario para la discusión y definición de la Reforma Orgánica y plan de Desarrollo.
En medio de esta situación la claridad como estudiantes radica en enmarcar nuestra lucha en la defensa de la Universidad Publica oponiéndonos a políticas como el plan de desarrollo del gobierno de Uribe que no solo atenta contra la universidad Publica sino contra los derechos fundamentales del pueblo colombiano en general.
EXIGIR PRESUPUESTO ADECUADO Y DIGNO PARA LA CALIDAD
REFORMAR LA UNIVERSIDAD ENTRE TOD@S Y PARA TOD@S
VAMOS HACIA LA CONSTITUYENTE UNIVERSITARIA
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LOS PARAMILITARES ASESINAN A FRANCISCO.El anterior escrito no refleja necesariamente la postura política e ideológica de EL MACARENAZOO, por lo tanto no se responsabiliza del mismo. Es importante tener en cuenta, también, que el escrito no tiene en cuenta lo que trscendió ayer de la reunión delpresidente Uribe y algunos rectores de universidades públicas.
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