Comentarios y fotos: G.A.C.R.
Las Brigadas Antiimperialistas consideraron a Uribe como el Führer, debido a sus prácticas fascistas, que van en detrimento de la humanidad. La marcha fue considerada como una marcha fascista en apoyo al Führer, lo cual fue así, según se observa en la segunda foto, donde con el lema “Colombia con Uribe”, las personas apoyaron al terrorista de la casa de Nariño:
Muchas personas pueden pensar que este gobierno es excelente, o por lo menos bueno; empero la realidad es otra, el lunes salieron millones de personas en todo el mundo, dentro de los cuales no se vieron indígenas, campesinos, desplazados, personas descalzas, los familiares de los secuestrados, etc., y era de esperarse la marcha fue de la derecha para legitimar la guerra que poseen, su negocio. Muchos salieron, pero dentro de esos números, rostros, que transmitieron los medios monopólicos de la información no se vieron pobres, a pesar de que esta población representa una parte del país:
En la Universidad Distrital, sede Macarena, la marcha del fascismo se hizo sentir, como una crítica a ese día… ¿Estas fotos la vieron en otro lado, en El Tiempo, en Hoy, en los canales? ¿No? Lógico, el sistema no se golpea a sí mismo:
“Más educación y menos violencia”, solicitaron los estudiantes de la Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca. Durante la marcha, decenas de universidades marcharon; todas ellas de índole privado, mas sus propuestas resultaron ser más coherentes con los gritos hilarantes de los organizadores en la Plaza de Bolívar:
A esta pareja muchas personas se les acercaron para comentarles en voz baja que “esa era la pancarta más coherente que se veía en toda la Séptima”. De inmediato la pareja respondió: “Sí, seguramente, acá nadie sabe en realidad por qué marcha, parecen borregos, y así no es la movilización”. Si usted marchó, ¿sabe por qué lo hizo? ¿Porque por Caracol y RCN lo anunciaron, porque era el clamor del pueblo? ¿Es usted conciente de la causa de esta guerra? Y en cuanto a la pancarta de la pareja, en términos concisos expuso qué consecuencias trae la marcha y seguir el juego mediático de los medios y del propio gobierno: Legitimar una política de guerra natural del Estado:
“Que se marche la violencia” es muy distinto a decir “marchemos por la violencia”. En términos del lenguaje existe en sentido figurado, decir “en contra de”, significa de plano estar de acuerdo con acabar “a como dé lugar” ese enemigo, lo que a la larga es legitimar la violencia; la paz por medio de las balas:
Esta secuencia muestran a un campesino dentro de la marcha, a una cuadra de la plaza de Bolívar, con un letrero que era conciso también: Hace 50 años surgieron las FARC por una serie de problemas sociales que el gobierno empecinaba en ahondarlos, inicialmente fueron campesinos desterrados, explotados y humillados por los terratenientes; ahora son un ejército que en sus prácticas de guerra han llegado a cometer acciones en detrimento de la humanidad, que viola la dignidad humana y que utiliza métodos rechazados en el mundo entero, como el secuestro. Ahora, con el gobierno de Álvaro Uribe, la situación no cambia, sino que se compleja aún más, con la defensa de las tierras de los narcotraficantes y paramilitares que les pertenecen a pueblos indígenas; con la reforma tributaria; con el IVA a todos los productos de la canasta familiar; con la puesta en marcha de la doctrina gringa de seguridad ciudadana, llamada acá de “seguridad democrática”… Todas estas acciones pensadas por los ricos para oprimir a los pobres:
Esta pancarta llamó la atención, pero curiosamente no recibió adhesión, sólo miradas inexpresivas para quienes la cargaban: Un trío de personas sin camisetas oficiales, sin corbatas, con ropa gastada, una mujer con un niño en brazos, un joven sin gafas ni tomando Coca-Cola y un señor que pidió ser escuchado en la tarima, pero que fue rechazado. ¿Será por lo que decía?: “No más… parapolítica?, masacres?, narcotráfico?, desplazados, manipulación”. Muy contrario al enemigo que vieron los organizadores…
Un cartel también sensato, no sólo la guerrilla es el problema, sino también la parapolítica y el paramilitarismo. Y a diferencia de la mayoría, incluyendo los organizadores, con propuesta: “Acuerdo humanitario ¡Primero la vida!”
“Contra todas…” ¿Nos acordamos que el año pasado el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) se movilizó con su tropa por todas las casas que querían ser rapadas por algunos bancos, y éstos muy acuciosos ayudaron a desalojar a las familias y dejarlas sin techo? ¿Nos acordamos de los mil asesinatos que ha cometido Uribe en su periodo? ¿No lo sabía? Caracol, RCN, El Tiempo, Hoy, algunos medios comunitarios más interesados en vender pauta que en hacer trabajo local, etc., no lo presentan, pero existe… Es tan terrorista el gobierno y sus fuerzas armadas, como los paramilitares y la guerrilla:
Las Brigadas Antiimperialistas consideraron a Uribe como el Führer, debido a sus prácticas fascistas, que van en detrimento de la humanidad. La marcha fue considerada como una marcha fascista en apoyo al Führer, lo cual fue así, según se observa en la segunda foto, donde con el lema “Colombia con Uribe”, las personas apoyaron al terrorista de la casa de Nariño:Muchas personas pueden pensar que este gobierno es excelente, o por lo menos bueno; empero la realidad es otra, el lunes salieron millones de personas en todo el mundo, dentro de los cuales no se vieron indígenas, campesinos, desplazados, personas descalzas, los familiares de los secuestrados, etc., y era de esperarse la marcha fue de la derecha para legitimar la guerra que poseen, su negocio. Muchos salieron, pero dentro de esos números, rostros, que transmitieron los medios monopólicos de la información no se vieron pobres, a pesar de que esta población representa una parte del país:En la Universidad Distrital, sede Macarena, la marcha del fascismo se hizo sentir, como una crítica a ese día… ¿Estas fotos la vieron en otro lado, en El Tiempo, en Hoy, en los canales? ¿No? Lógico, el sistema no se golpea a sí mismo:“Más educación y menos violencia”, solicitaron los estudiantes de la Universidad Colegio Mayor de Cundinamarca. Durante la marcha, decenas de universidades marcharon; todas ellas de índole privado, mas sus propuestas resultaron ser más coherentes con los gritos hilarantes de los organizadores en la Plaza de Bolívar:A esta pareja muchas personas se les acercaron para comentarles en voz baja que “esa era la pancarta más coherente que se veía en toda la Séptima”. De inmediato la pareja respondió: “Sí, seguramente, acá nadie sabe en realidad por qué marcha, parecen borregos, y así no es la movilización”. Si usted marchó, ¿sabe por qué lo hizo? ¿Porque por Caracol y RCN lo anunciaron, porque era el clamor del pueblo? ¿Es usted conciente de la causa de esta guerra? Y en cuanto a la pancarta de la pareja, en términos concisos expuso qué consecuencias trae la marcha y seguir el juego mediático de los medios y del propio gobierno: Legitimar una política de guerra natural del Estado:“Que se marche la violencia” es muy distinto a decir “marchemos por la violencia”. En términos del lenguaje existe en sentido figurado, decir “en contra de”, significa de plano estar de acuerdo con acabar “a como dé lugar” ese enemigo, lo que a la larga es legitimar la violencia; la paz por medio de las balas:Esta secuencia muestran a un campesino dentro de la marcha, a una cuadra de la plaza de Bolívar, con un letrero que era conciso también: Hace 50 años surgieron las FARC por una serie de problemas sociales que el gobierno empecinaba en ahondarlos, inicialmente fueron campesinos desterrados, explotados y humillados por los terratenientes; ahora son un ejército que en sus prácticas de guerra han llegado a cometer acciones en detrimento de la humanidad, que viola la dignidad humana y que utiliza métodos rechazados en el mundo entero, como el secuestro. Ahora, con el gobierno de Álvaro Uribe, la situación no cambia, sino que se compleja aún más, con la defensa de las tierras de los narcotraficantes y paramilitares que les pertenecen a pueblos indígenas; con la reforma tributaria; con el IVA a todos los productos de la canasta familiar; con la puesta en marcha de la doctrina gringa de seguridad ciudadana, llamada acá de “seguridad democrática”… Todas estas acciones pensadas por los ricos para oprimir a los pobres:Esta pancarta llamó la atención, pero curiosamente no recibió adhesión, sólo miradas inexpresivas para quienes la cargaban: Un trío de personas sin camisetas oficiales, sin corbatas, con ropa gastada, una mujer con un niño en brazos, un joven sin gafas ni tomando Coca-Cola y un señor que pidió ser escuchado en la tarima, pero que fue rechazado. ¿Será por lo que decía?: “No más… parapolítica?, masacres?, narcotráfico?, desplazados, manipulación”. Muy contrario al enemigo que vieron los organizadores…Un cartel también sensato, no sólo la guerrilla es el problema, sino también la parapolítica y el paramilitarismo. Y a diferencia de la mayoría, incluyendo los organizadores, con propuesta: “Acuerdo humanitario ¡Primero la vida!”“Contra todas…” ¿Nos acordamos que el año pasado el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) se movilizó con su tropa por todas las casas que querían ser rapadas por algunos bancos, y éstos muy acuciosos ayudaron a desalojar a las familias y dejarlas sin techo? ¿Nos acordamos de los mil asesinatos que ha cometido Uribe en su periodo? ¿No lo sabía? Caracol, RCN, El Tiempo, Hoy, algunos medios comunitarios más interesados en vender pauta que en hacer trabajo local, etc., no lo presentan, pero existe… Es tan terrorista el gobierno y sus fuerzas armadas, como los paramilitares y la guerrilla:Prohibido usar armas. ¿Qué pensarán los amigos de verde, teniendo todas sus armas no convencionales debajo del chaleco?:
Los desplazados cuentan. Leyenda de la imagen: “Por más niño que tú seas, tú sientes miedo al ver cómo te maltratan a tus hermanos, tíos, familiares, tus primos, tus padres; al ver cómo tus padres se sienten como masacrados, al ver cómo sufren”:
Un no a las cadenas, debe reflejarse en todos los aspectos, como otra pancarta de la Plaza de Bolívar que rezaba: “La corrupción estatal es secuestro social”:
Durante la marcha, en la Avenida Jiménez con séptima, se desarrolló una jornada de “Reforestación de la inteligencia”, donde los participantes jugaron ajedrez contra los organizadores… Muchos transeúntes perdieron frente a una sola persona que disputaba cuatro partidas a la vez. ¿Oportuno haberlo hecho este 4 de febrero, día en que la mayoría de Colombia decidió olvidarse de la memoria histórica, y seguir sumisos instrucciones de sus jefes en las empresas, de sus compañeros en la oficina, de los canales de televisión y emisoras de radio?:
Empresas e instituciones que avalaron y apoyaron la marcha del 4 de febrero: Postobón, Bavaria, Caracol, RCN, El Tiempo, Semana El Espectador, ETB, Alcaldía Mayor de Bogotá, Lotería de Bogotá; casualmente las mismas que aparecen en este cartel:
Los organizadores que contaban con recursos pírricos, según sus propias palabras, instalaron un televisor de más de 70 pulgadas, sonido, seguridad privada, cámaras, contrataron logística, y les alcanzó para comprar cientos de flores que regalaron a los transeúntes:
La religión estuvo presente. Estas pancartas y decenas más, demostraron que en su simbiosis los creyentes estaban más concientes de la situación, sin promover el odio, la exclusión y, adyacentemente, la guerra. Una pancarta que fue transmitida por los medios, decía claramente: “Marulanda, Cristo te quiere”. Esta consigna fue utilizada por decenas de medios monopólicos para legitimar la marcha como una movilización “por la paz”, y no, como dijo Piedad Córdoba, “de racismo, de odio”:
Estas imágenes muestran el odio por todas partes. La marcha nunca fue por la paz, fue a favor de la guerra. También demuestran la polarización del país: si no es blanco, entonces es negro, excluyendo toda posibilidad de grises. Los ataques contra los facilitadotes y, en los últimos meses únicos interesados en negociar sanamente con la guerrilla, Hugo Chávez y Piedad Córdoba, interlocutores pero no voceros de las FARC, así lo demuestran. En la primera manifestación de este tipo, después de la muerte de los once ex diputados del Valle, Córdoba estuvo presente en Bogotá, en la marcha, condenando el asesinato, apoyando al pueblo, situaciones que rápidamente olvidan los colombianos y los medios que con su campaña acérrima contra las gestiones de la senadora y del presidente venezolano, justifican que llegue incluso a ser agredida físicamente, y esos medios no toquen siquiera el tema. La imagen en la camiseta que reza “Chávez, go home”, demuestra una intervención del imperio que resulta exagerada; utilizando para sus fines belicistas (de quienes diseñaron el slogan y el modelo) la imagen de Juan Valdez, símbolo ampliamente reconocido en el exterior, como si fuera gringa… ¿Será porque el café nuestro, no es ya tan de acá, sino de allá? ¿Será porque nos gusta más el inglés, que nuestro acerbo indígena? ¿Será porque queremos un presidente arrodillado al imperio norteamericano, y no a alguien que se interese en resolver los problemas de desnutrición en el Chocó, aplicar justicia real a los asesinos, y no ser corrupto?:
Los desplazados cuentan. Leyenda de la imagen: “Por más niño que tú seas, tú sientes miedo al ver cómo te maltratan a tus hermanos, tíos, familiares, tus primos, tus padres; al ver cómo tus padres se sienten como masacrados, al ver cómo sufren”:
Un no a las cadenas, debe reflejarse en todos los aspectos, como otra pancarta de la Plaza de Bolívar que rezaba: “La corrupción estatal es secuestro social”:Durante la marcha, en la Avenida Jiménez con séptima, se desarrolló una jornada de “Reforestación de la inteligencia”, donde los participantes jugaron ajedrez contra los organizadores… Muchos transeúntes perdieron frente a una sola persona que disputaba cuatro partidas a la vez. ¿Oportuno haberlo hecho este 4 de febrero, día en que la mayoría de Colombia decidió olvidarse de la memoria histórica, y seguir sumisos instrucciones de sus jefes en las empresas, de sus compañeros en la oficina, de los canales de televisión y emisoras de radio?:Empresas e instituciones que avalaron y apoyaron la marcha del 4 de febrero: Postobón, Bavaria, Caracol, RCN, El Tiempo, Semana El Espectador, ETB, Alcaldía Mayor de Bogotá, Lotería de Bogotá; casualmente las mismas que aparecen en este cartel:La marcha va a ser utilizada por el gobierno de Uribe para legitimar la política de guerra que pretende imponer en toda Colombia bajo la llamada “Seguridad democrática”. Esto incluye, por supuesto, “rescatar” a los secuestrados a la fuerza, lo que decenas de veces se ha tratado de hacer, pero que por la presión de familiares, de la comunidad internacional, y de instituciones no han podido llevar a cabo:
Los organizadores de la marcha y los medios insistieron que la marcha no tenía “intereses partidistas”, que no era promovida por el Estado, que sólo era un clamor del pueblo contra las FARC. Casualmente el discurso de los organizadores y del gobierno, no se distancia mucho entre sí: Convocar a toda la gente contra un solo actor es legitimar otro actor que le haga resistencia, y es un llamado a la guerra, nunca a la paz. Estas imágenes demuestran que el gobierno complacidamente salió a las calles a apoyar su movilización, irónicamente cuando ellos mismos han sido directos perpetradores de la miseria, de la guerra, de la corrupción, del robo, del asesinato, etc.:
Los organizadores que contaban con recursos pírricos, según sus propias palabras, instalaron un televisor de más de 70 pulgadas, sonido, seguridad privada, cámaras, contrataron logística, y les alcanzó para comprar cientos de flores que regalaron a los transeúntes:
La religión estuvo presente. Estas pancartas y decenas más, demostraron que en su simbiosis los creyentes estaban más concientes de la situación, sin promover el odio, la exclusión y, adyacentemente, la guerra. Una pancarta que fue transmitida por los medios, decía claramente: “Marulanda, Cristo te quiere”. Esta consigna fue utilizada por decenas de medios monopólicos para legitimar la marcha como una movilización “por la paz”, y no, como dijo Piedad Córdoba, “de racismo, de odio”:Estas imágenes muestran el odio por todas partes. La marcha nunca fue por la paz, fue a favor de la guerra. También demuestran la polarización del país: si no es blanco, entonces es negro, excluyendo toda posibilidad de grises. Los ataques contra los facilitadotes y, en los últimos meses únicos interesados en negociar sanamente con la guerrilla, Hugo Chávez y Piedad Córdoba, interlocutores pero no voceros de las FARC, así lo demuestran. En la primera manifestación de este tipo, después de la muerte de los once ex diputados del Valle, Córdoba estuvo presente en Bogotá, en la marcha, condenando el asesinato, apoyando al pueblo, situaciones que rápidamente olvidan los colombianos y los medios que con su campaña acérrima contra las gestiones de la senadora y del presidente venezolano, justifican que llegue incluso a ser agredida físicamente, y esos medios no toquen siquiera el tema. La imagen en la camiseta que reza “Chávez, go home”, demuestra una intervención del imperio que resulta exagerada; utilizando para sus fines belicistas (de quienes diseñaron el slogan y el modelo) la imagen de Juan Valdez, símbolo ampliamente reconocido en el exterior, como si fuera gringa… ¿Será porque el café nuestro, no es ya tan de acá, sino de allá? ¿Será porque nos gusta más el inglés, que nuestro acerbo indígena? ¿Será porque queremos un presidente arrodillado al imperio norteamericano, y no a alguien que se interese en resolver los problemas de desnutrición en el Chocó, aplicar justicia real a los asesinos, y no ser corrupto?: En la tarima principal, ubicada en la Plaza de Bolívar, los organizadores y su vocero, con alma de cura, gritando al unísono “¡No más FARC! ¡No más FARC!”, mientras le indicaban a los asistentes que unieran sus manos, que cantaran con patriotismo el himno nacional, que aceptaran su falta de argumentos frente al conflicto, y se hicieran los sordos frente a un puñado de personas frente a la tarima que le reclamaban por los paramilitares, por la para política, por los falsos positivos, por los desplazados… Sin argumentos, sin oídos, sin mente, gritar una y otra vez “¡No más FARC! ¡No más FARC!”:
En el congreso de la República se extendió esta pancarta. La foto quedó con el haz de luz del sol, que ojala no represente la imagen divina. ¿Será que esta pancarta la colocaron los amigos del partido de la U, quienes en su campaña de octubre tuvieron el lema “Unidos como debe ser”? Desde este recinto, también policías, empleados, y funcionarios vieron el show de la plaza de Bolívar: 
Por supuesto que se corría el riesgo de que aparecieran personas que criticaran la marcha, o que gritaran por sus derechos, o que colocaran el nombre de los otros actores del conflicto, que marcharan en contra del desplazamiento, de los “parras”… En fin, frente a estas eventualidades puede que hayan aparecido estos agentes de civil, que portando radio teléfonos, vigilaban constantemente a las personas en las calles:
Los niños participaron, o los hicieron participar, en la marcha; como los niños y jóvenes que salieron hace un año a protestar; como los niños que son llevados por sus padres todo primero de mayo; como Nicolás David Neira, un menor de edad que salió un 1º de mayo, y nunca regresó a la casa porque el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la policía lo asesinó hace más de mil días, y los medios no le han dado la importancia que merece este caso de impunidad. Si los niños salen a estas movilizaciones fascistas también lo pueden hacer en las demás, sin que se corra el riesgo de justificar su muerte por estar ahí (como pasó con Neira):
Efectivamente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) utilizan tácticas de guerra crueles contra los retenidos, que son consideras como terroristas por la comunidad nacional e internacional; esto merece toda muestra de repudio. La practica del secuestro (que no sólo es utilizada por la guerrilla, sino por el Estado, la delincuencia común y los paramilitares) que no deviene de la situación de conflicto, de situaciones coyunturales de la guerra, sino que se produce por situaciones ajenas al enfrentamiento armado, es denunciada como una agresión y violación a los derechos humanos. Ahora bien, el Ejército retiene a guerrilleros en combate, lo mismo hace la guerrilla con los soldados; en una guerra donde dos ejércitos regulares se enfrentan esto es tolerable, lo que no es aceptable es el trato a los detenidos… Por eso el acuerdo humanitario, que no significa una negociación de paz, es necesario y debería ser prioridad del gobernador de turno: 
Esta bandera es quemada en Palestina, y otras partes del mundo, como símbolo de rechazo a la intervención en territorio ajeno del Estado de Israel. Acá luce ondeante junto a la bandera colombiana, sólo faltaría la de Estados Unidos, gobierno aliado de estos dos países:
Dos formas de mostrar cómo se encuentran los secuestrados; por un lado sin voz, y, según las pruebas de supervivencia, encadenados:
Una muestra del hit comercial que representó la marcha. Los vendedores ambulantes, como siempre ingeniosos, esta vez vendieron desde pitos hasta palomas de madera movibles:
“Libertad y paz”, con el símbolo de “Colombia es pasión”. En primer plano, una mascota con la camiseta de la marcha, como si fuese un partido de fútbol, sólo un show, un espectáculo mediático. Y su espectáculo también contó con “porras” desde la tribuna, en las alturas, como lo demuestra la otra foto; risas en la marcha se vieron bastantes, improperios también, pero la emoción de pertenecer a algo prevaleció:
Otras imágenes tomadas ese día:
En el congreso de la República se extendió esta pancarta. La foto quedó con el haz de luz del sol, que ojala no represente la imagen divina. ¿Será que esta pancarta la colocaron los amigos del partido de la U, quienes en su campaña de octubre tuvieron el lema “Unidos como debe ser”? Desde este recinto, también policías, empleados, y funcionarios vieron el show de la plaza de Bolívar: Por supuesto que se corría el riesgo de que aparecieran personas que criticaran la marcha, o que gritaran por sus derechos, o que colocaran el nombre de los otros actores del conflicto, que marcharan en contra del desplazamiento, de los “parras”… En fin, frente a estas eventualidades puede que hayan aparecido estos agentes de civil, que portando radio teléfonos, vigilaban constantemente a las personas en las calles:Los niños participaron, o los hicieron participar, en la marcha; como los niños y jóvenes que salieron hace un año a protestar; como los niños que son llevados por sus padres todo primero de mayo; como Nicolás David Neira, un menor de edad que salió un 1º de mayo, y nunca regresó a la casa porque el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la policía lo asesinó hace más de mil días, y los medios no le han dado la importancia que merece este caso de impunidad. Si los niños salen a estas movilizaciones fascistas también lo pueden hacer en las demás, sin que se corra el riesgo de justificar su muerte por estar ahí (como pasó con Neira): Efectivamente las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) utilizan tácticas de guerra crueles contra los retenidos, que son consideras como terroristas por la comunidad nacional e internacional; esto merece toda muestra de repudio. La practica del secuestro (que no sólo es utilizada por la guerrilla, sino por el Estado, la delincuencia común y los paramilitares) que no deviene de la situación de conflicto, de situaciones coyunturales de la guerra, sino que se produce por situaciones ajenas al enfrentamiento armado, es denunciada como una agresión y violación a los derechos humanos. Ahora bien, el Ejército retiene a guerrilleros en combate, lo mismo hace la guerrilla con los soldados; en una guerra donde dos ejércitos regulares se enfrentan esto es tolerable, lo que no es aceptable es el trato a los detenidos… Por eso el acuerdo humanitario, que no significa una negociación de paz, es necesario y debería ser prioridad del gobernador de turno: Esta bandera es quemada en Palestina, y otras partes del mundo, como símbolo de rechazo a la intervención en territorio ajeno del Estado de Israel. Acá luce ondeante junto a la bandera colombiana, sólo faltaría la de Estados Unidos, gobierno aliado de estos dos países:Dos formas de mostrar cómo se encuentran los secuestrados; por un lado sin voz, y, según las pruebas de supervivencia, encadenados:
Una muestra del hit comercial que representó la marcha. Los vendedores ambulantes, como siempre ingeniosos, esta vez vendieron desde pitos hasta palomas de madera movibles:
“Libertad y paz”, con el símbolo de “Colombia es pasión”. En primer plano, una mascota con la camiseta de la marcha, como si fuese un partido de fútbol, sólo un show, un espectáculo mediático. Y su espectáculo también contó con “porras” desde la tribuna, en las alturas, como lo demuestra la otra foto; risas en la marcha se vieron bastantes, improperios también, pero la emoción de pertenecer a algo prevaleció:Otras imágenes tomadas ese día:
El cierre, por supuesto, para este show mediático, debería ser con el imperio: Y no sólo con él, sino con una empresa que ha apoyado grupos paramilitares para aniquilar empleados que exigen mejores tratos y cumplimiento en sus derechos. Coca – Cola ha asesinado una decena de empleados sindicalizados en Colombia, en India roba el agua a comunidades pobres y sedientas, y utiliza prácticas terroristas para aniquilar cualquier competencia, como hizo con Big Cola en México. Por esto su consumo justifica esas atrocidades, y las legitima. Algo similar sucedió con la marcha: Protestar contra un actor, legitima y tolera las prácticas que pueda llegar a hacer el Estado en su afán por eliminar todo viso de oposición:
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